viernes, 18 de noviembre de 2011

Costumbres

costumbres y tradiciones de alajuela

en alajuela, hay varias costumbres que se han arraigado a travez de los años, y otras lascuales ya se han perdido, ya sea por falta de interes hasta por la modernizacion de la ciudad en si

Catedral
 es una costumbre entre los alajuelenses decirse apodos, ya sea en la ciudad como en los alrededores, ademas de darse paseos en los distintos parques ya sea el central, el parque palmares, el parque del agricultor, etc, ademas de observar los aviones salir y venir del aropuerto, celebrar los distintos desfiles patros, sobre todo el 11 de abril ya que se commemora el heroico acto de juan santamaria (el cual es oriundo de esta ciudad).

ademas deeso, alajuela es caracterizada por su pasion al futbol, por este motivo en cada barrio hay una plaza el cual la gente mejengea para divertirse, ademas de acudir todos los fines de semana al estadio de la liga deportiva alajuelense.

los alajuelenses tambien son muy devotos y celebrtan misas todos los fines en sus respectivos barrios, o en la iglesia de la catedral o el de la agonia

esta y otras costumbres y tradiciones han caracterizado a la gente de esta ciudad, la cual es la que vivimos.

Imágenes





Fotografia Gurpal

Costumbres y Tradiciones de Alajuela

Historia:

Durante la era precolombina estuvo habitada en el sur por los huetares y en la parte norte por los indígenas "votos" guatusos, huetares, tices y catapas. En 1574 se fundó el asentamiento indígena de Santa Catalina, en lo que hoy es el cantón de San Mateo.Con los españoles llegaron nuevos virus y epidemias para los cuales los indígenas no tenían anticuerpos, provocando que su población se redujera. Los autóctonos que sobrevivieron a las epidemias y a los conquistadores, radicados en la región occidental del Valle Central, específicamente al oeste del río Virilla, fueron obligados a vivir en un sólo lugar: el "Pueblo de Indios de Barva". Allí eran controlados y explotados por los españoles. Las tribus del resto de la actual provincia resistieron por unos siglos más, manteniéndose sus nativos libres.
La primera vez que se mencionó oficialmente fue en el año 1657. Se cita en el testamento de Juana de Vera y Sotomayor, quien tenía "una estancia en el río de La Lajuela con 400 yeguas y un burro, 200 reses vacunas y 30 y tantas bestias mulares". Esta fue la primera propiedad registrada en la localidad de Alajuela.
La etapa de mayor intensidad colonizadora comprendió principalmente la segunda mitad del Siglo XVIII. A lo largo de ese período se formaron cinco caseríos que se extendían desde el río Segundo hasta las faldas monte del Aguacate, llamados: Los Targuases (Desamparados de Alajuela, colindando con Santa Bárbara de Heredia), La Lajuela, Las Ciruelas, Púas (El Cacao de Alajuela) y Río Grande (Atenas).
En 1777 muchas familias debían trasladarse para los oficios religiosos hasta la parroquia de Villa Vieja (Heredia), pero las distancias y la miseria les impedían asistir. El cura párroco Juan Manuel López del Corral pidió permiso para levantar una iglesia en las cercanías del "caserío La Alajuela". El Obispo don Esteban Lorenzo de Tristán visitó la localidad y aprobó la creación de un oratorio. El 12 de octubre de 1782, aquellos dos clérigos consagraron ese oratorio en La Alajuela, por estar a igual distancia para todos los vecinos de la región.